La Betónica es un arbusto silvestre nativo, con mucha historia y varias flores de color rosa a morado y algunas veces también blancas, las cuales son comúnmente visitadas por los insectos (En especial los abejorros aman estas flores). La betónica pertenece a las plantas medicinales olvidadas y ha sido una planta usada y mencionada muy frecuentemente para todo tipo de afecciones desde la antigüedad hasta la Edad Media. Se consideraba la panacea y se usaba especialmente cuando la gente no sabía lo que tenía el paciente. La betónica solía plantarse en jardínes de monasterios, boticarios y alrededor de iglesias. Le gusta auto sembrarse y forma cubiertas para suelos de manera rápida. También es perfecta para plantarla como borde herbáceo. Como planta para teñir, la betónica produce un hermoso color amarillo pardo.
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