Cómo llevar a cabo una prueba de germinación: guía breve

Todos lo han experimentado: no utilizas todas las semillas de un paquete y al año siguiente te quedas con la duda si las semillas seguirán germinando... Algunos fabricantes indican en los sobres una especie de fecha de caducidad. Es una buena orientación. Sin embargo, si quieres saberlo con exactitud, basta con que compruebes la capacidad germinativa de las semillas mediante una prueba de germinación.

El momento adecuado para realizar las pruebas de germinación es el invierno y el principio de la primavera. Normalmente no hay mucho que hacer en el jardín y en primavera, en el momento de la siembra, se quiere saber si las semillas siguen germinando.

Necesitarás los siguientes materiales para realizar una prueba de germinación:

  • Una bandeja de siembra poco profunda o un plato plano.
  • Papel multicapa bien absorbente. Lo ideal es simplemente usar papel de cocina.
  • Una bolsa de plástico transparente en la que quepa la bandeja o, si ya tienes uno, un mini-invernadero. También se puede hacer una tapa con film transparente.
  • Una botella de spray con agua
  • Semillas para hacer las pruebas
  • Posiblemente materiales para el etiquetado

Cómo funciona la prueba de germinación

  1. Coge tu bandeja de siembra y coloca en ella el papel de cocina multicapa.
  2. Humedece el papel con el pulverizador para que esté bien húmedo. Sin embargo, éste no debe flotar en agua estancada.
  3. Cuenta al menos 10 semillas y espárcelas sin apretar sobre el papel húmedo. El número de semillas debe depender de cuántas semillas haya en una bolsa. Si hay más de 100 semillas en una bolsa, prueba con más semillas. Sin embargo, debes contar realmente lo que estás probando.
  4. Si quieres probar distintas variedades, te recomendamos separar bien las semillas entre sí y, sobre todo, etiquetar las variedades.
  5. Ahora coloca toda la bandeja en el mininvernadero o en una bolsa de plástico o cúbrela con film transparente. En este último caso, asegúrate de hacer unos pequeños agujeros en el papel de aluminio con un palillo para evitar que las semillas se enmohezcan.
  6. Ahora coloca la pequeña "incubadora" en un lugar lo más luminoso y cálido posible. En este punto, es muy útil que conozcas los requisitos de siembra de la variedad, como la temperatura óptima de germinación o cuánta luz necesitan las semillas para germinar. Intenta crear las condiciones adecuadas para tu estación de siembra.
  7. Ahora toca esperar y tener paciencia. A veces encontrarás una indicación del periodo de germinación en el paquete de semillas. La mayoría de las semillas germinan entre unos días y tres semanas. Comprueba la humedad pasados pocos días. El papel no debe secarse nunca y hay que volver a humedecerlo si es necesario.
  8. Al cabo de tres semanas como máximo o una vez transcurrido el período de germinación especificado, cuenta cuántas semillas han germinado y calcula el porcentaje de semillas germinadas en relación con el número total de semillas utilizadas.

¿Cómo debe evaluarse el resultado de la prueba de germinación?

Si la capacidad de germinación es superior al 75%, puedes utilizar las semillas sin dudarlo y sembrarlas siguiendo las instrucciones del sobre. Si la capacidad de germinación está entre el 75 y el 50%, debes sembrar una cantidad mayor de semillas porque no germinarán todas. No obstante, las semillas pueden seguir utilizándose. Si la capacidad de germinación es inferior al 50%, la siembra ya no merece la pena. Aun así, puedes ofrecer estas semillas a los pájaros como alimento. Puede que se alegren.
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